Ante el aumento del número de personas con dificultades de personalidad, indigentes agresivos y otros problemas de salud mental, tanto en calles y parques de las ciudades de la costa chiapaneca, sectores sociales piden la creación de una clínica de salud mental en Tapachula.
Los indigentes y personas con desequilibrio mental, representan un problema social y de seguridad, pues caminan a orillas de las carreteras, se cruzan las calles sin precaución duermen afuera de los negocios, y parece que este sector no existe para la clase gobernante.
Ante esta situación, el presidente de la asociación Civil Nueva Generación, Vinculación Social, Alfredo de la Cruz Cordero, hizo referencia a un reciente caso ocurrido en Tapachula en el que una familia que viajaba en su vehículo, tres de ellos perdieron la vida al accidentarse la unidad por evitar arrollar a un indigente que deambulaba en la carretera al puerto y que ocasionó el mortal percance.
El líder social reconoció que en ningún municipio de la costa Chiapaneca existe una clínica de salud que dé atención a estas personas con problemática de tipo psiquiátrico a lo que se suma que en muchas ocasiones las familias ya no los atienden y los enfermos caen en la indigencia.
Aunque no es una petición nueva y que incluso en campañas electorales se ha retomado hoy es una oportunidad para que se asuma un compromiso de un lugar digno donde se dé este tipo de atención que es facultad de la autoridad tanto federal, estatal y municipal para que se destinen recursos y contar con un Centro Psiquiátrico con las características requeridas.
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En la actualidad a ese universo de indigentes con problemas mentales se han sumado ya muchos extranjeros que presentan problemas mentales y todos en general carecen de atención al no haber un centro especializado.
Por otra parte, de la Cruz Cordero señaló que a este riesgo de seguridad para la población se suman otro sector como el de los migrantes que no respetan las leyes en de educación vial pues cruzan las calles sin ninguna precaución exponiéndose a ser atropellados y con ello afectar a los automovilistas que se ven expuestos a accidentes.