Desierto luce el osario de la Cripta en el parque Bicentenario, donde la afluencia de visitantes que mantienen los restos de sus seres queridos ha sido baja, en plena celebración a los fieles difuntos.
Este 1 de noviembre, las urnas recibieron pocas visitas, dado que es un sitio con menor llegada de personas, a comparación de los cementerios donde hubo alta presencia de visitantes.
Las autoridades religiosas de esta iglesia, expusieron que el osario permanecerá abierto este 2 de noviembre, para que las familias de los difuntos que yacen en cenizas en este punto, puedan acudir, realizar oración y dejar ofrendas florales a sus seres que han partido.
“Se puede ingresar pero con las medidas sanitarias pertinentes, no se dará acceso para muchas personas a la vez con tal de cuidar la salud de todos, este es un espacio de descanso al cual pueden acudir los familiares de las personas que fueron depositadas en cenizas en dichas urnas”, expuso uno de los empleados administrativos de la Cripta.
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Este osario, según los empleados del lugar, tiene espacio para más de cien urnas, las cuales pagan un derecho anual por preservar allí las cenizas de personas que han fallecido.
El tiempo para permanecer adentro no tiene restricciones, aunque pasadas las 17:00 horas se cierra el complejo junto con la iglesia.
Las autoridades religiosas esperan que este 2 de noviembre el flujo de visitantes sea mayor, ya que es este martes cuando la celebración de Día de Muertos tiene más afecto y está más consolidado para realizar ofrendas a los fieles difuntos.
En Tapachula, en al menos cuatro iglesias se cuenta con nichos para el depósito de urnas con restos humanos en cenizas, esto cada vez se convierte en una opción más cómoda para las familias de la región Soconusco.
