Un joven venezolano ha recorrido un promedio de 3,000 kilómetros desde que salió de Venezuela hasta territorio nacional en busca de llegar a los Estados Unidos para tener una mejor oportunidad de vida y poder ayudar a sus padres.
El joven sudamericano, Christofer García, mencionó que ha pasado un mes desde que inició su travesía y hasta el momento ha caminado por Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala y ahora busca avanzar hacia la frontera norte de México.
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“En Venezuela, las cosas están difíciles, y mis padres ya están mayores. Por eso decidí salir de mi país con la esperanza de llegar a los Estados Unidos, porque quiero ayudar a mi papá y mamá para que se queden en Caracas”, expresó.
Añadió que ha estado sobre una tabla durante años, ya que desde los 15 le agarró amor al deporte y no se ha podido separar de ella, especialmente ahora que está en la caravana, ya que ahorra algunos gastos durante su travesía.
El joven de 24 años contó que está solo en este viaje que comenzó hace más de 30 días y su única compañía es su tabla, que buscará llevar a los Estados Unidos en esta travesía que inició en septiembre de este año.
Mencionó que la tabla se la regaló su padre y no la dejará atrás en su paso por México, ya que tiene un significado importante en su vida, al igual que en el viaje que inició desde Venezuela en busca de una mejor oportunidad de vida para sus padres.
“Cada migrante que integra la caravana tiene una historia de vida que explica del por qué dejaron su país de origen, ya que muchos lo hicieron debido a la violencia, las pandillas, el crimen organizado y la pobreza que afecta a muchos países de Centroamérica y Sudamérica”, agregó.
Externó que el objetivo de los venezolanos, cubanos, haitianos, nicaragüenses, guatemaltecos, salvadoreños, colombianos, brasileños, chilenos y otras nacionalidades que caminan por las carreteras de Chiapas hacia los Estados Unidos es llegar a ese país.
Explicó que cuando puede o se le permite agarrarse de un vehículo, avanzan más rápido en busca de su destino y su sueño americano, pero la Guardia Nacional que protege la caravana le dice que no lo haga para evitar posibles accidentes.
Puntualizó que todos tienen claro que no pueden vivir en México, ya que también enfrenta problemas económicos, pobreza y una crisis migratoria debido a la cantidad de personas que llegan procedentes de todas partes del mundo.