Migrantes venezolanos que están varados en Tapachula por las restricciones de Estados Unidos ahora buscan sobrevivir vendiendo comida a sus propios connacionales o realizando cualquier tipo de actividad productiva.
Explicaron que ellos quieren hacer sentir a sus connacionales como en casa, para que no echen de menos su gastronomía y se sientan como si estuvieran en Venezuela, en territorio mexicano.
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“Siéntase como en casa”, “llego la comida venezolana: Carne Guisada, Pollo Guisado y arroz con tajada”, es lo que grita, Rafear Campos, originario de Venezuela, para vender comida a los venezolanos que agarraron como campamento el parque central Miguel Hidalgo.
“La comida venezolana es carne de pollo o Chancho (puerco), comida típica que todo el tiempo comemos los venezolanos en nuestro país y optamos por hacer la nuestra para no extrañar que estamos lejos de casa”, expresó.
Narró que la idea nació porque pasó por la selva del Darién, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Guatemala y no encontraron comida venezolana por ninguno de los países que han pasado en busca de llegar a los Estados Unidos.
Comentó que el vende un promedio de 30 o 35 platos de comida venezolana con valor de 45 a 50 pesos a sus connacionales que duermen y viven en el parque central de la ciudad.
“Todos los que estamos lejos de Venezuela extrañamos a nuestra familia, hijos y comida, por ende emprendimos este negocio con el suegro de mi hermana para ganar un poco de dinero y pagar la renta del cuarto en donde vivimos seis personas”, expresó.
Seguirán buscando la manera de llegar a Estados Unidos
En la otra esquila del parque central se escucha el grito de lleve su “Papelón”, bebida tradicional venezolana que se hace con panela y limón que tiene un costo de 10 pesos.
Luis y Ángel, llegaron a la ciudad hace dos semanas y ahora hacen su trámite en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para solicitar asilo en este país por las restricciones de Estados Unidos.
Platicaron que están vendiendo esta bebida de su país para ganar un poco de dinero y conseguir para su comida mientras están en esta ciudad esperando la resolución de la Comar.
Indicaron que los venezolanos antes estaban pasando de largo y ahora tendrán que hacer una pausa en su camino, por ello, están buscando la manera de hacer algo productivo en esta ciudad y que mejor que vender esta bebida venezolana.
Dijeron que hay venezolanos trabajando de cargar cemento, reparando autos y venezolanas que están cuidando a niños, haciendo aseo o vendiendo comida y aguas frescas, así como ellos.
Puntualizó que en Tapachula deben buscar la manera de sobrevivir y es complicado poder agarrar un trabajo formal, porque no tienen papeles que demuestren que están de manera legal en este país.
Los venezolanos mencionaron que esperarán un tiempo en México, ya que se acercan las elecciones en los Estados Unidos y les pueden abrir las fronteras de nueva cuenta, por ende, no se pueden regresar a aún Venezuela.