Hace más de un siglo, la comunidad de San Perfecto, ubicada en el departamento de Santa Rosa en Guatemala, se vio envuelta en una tragedia que dejó una profunda marca en su historia. El 18 de abril de 1902, un terremoto de magnitud 7.5 sacudió la región, dejando a su paso una devastación sin precedentes. Según testigos, la tierra comenzó a temblar a las 8:53 pm, después de una fuerte lluvia que cayó sobre la ciudad al atardecer.
San Perfecto, una pequeña comunidad agrícola en el sur de Guatemala, se vio completamente devastada por el terremoto que duró varios minutos. Los informes de la época describen escenas desgarradoras de casas de adobe derrumbadas, personas atrapadas bajo los escombros y miles de muertos y heridos. La comunidad quedó sumida en el caos y la desesperación, con los sobrevivientes buscando a sus seres queridos y tratando de encontrar refugio y ayuda en medio de la confusión.
Te puede interesar: Siete décadas y media llevando información, noticias que han dejado huella
El compositor Mariano Valverde al recorrer la comunidad, se inspiró en la devastación para componer su famoso vals "Noche de luna entre ruinas".
El diplomático mexicano Rafael Gamboa, quien entonces fungía como embajador de su país en Guatemala escribió en su diario: "De súbito, comenzó un terremoto espantoso, que sacudía la casa y la ciudad entera, con reconcentrada extrahumana fuerza devastadora... Mi mujer cae de hinojos; la perra aúlla fatídicamente... Al pronto, quédome inmóvil con mi hijo entre mis brazos, sus grandes ojos de criatura inteligente, mirándome despavorido... Sin disminuir en su intensidad espantable, el terremoto continúa... Al cabo de siniestros parpadeos, la luz eléctrica se apaga; estamos en piso alto, en tinieblas, sin esperanza de salvación... Repican las arañas de cristal, crujen muebles, puertas y techos”.
La tragedia no terminó ahí. El 24 y 25 de octubre del mismo año, el volcán Santa María entró en erupción, lanzando arena y ceniza que se elevó a una altura de 30 kilómetros. La erupción sepultó gran parte de las zonas cafetaleras de Xolhuitz, Costa Cuca, Chuva, Progreso y Tumbador, según testimonios de testigos.
La erupción del volcán Santa María fue catastrófica. Lanzó una cantidad ingente de arena y ceniza que se elevó hasta 30 kilómetros de altura. Los residuos llegaron hasta Chiapas y en Quetzaltenango y San Marcos, el material volcánico alcanzó medio metro de espesor.
El vicecónsul de México en Retalhuleu, Teófilo Palacios, quien vivía en una finca a seis kilómetros del volcán, describió la erupción como "mucho más terrible y asoladora" que el terremoto, y dijo que el ruido que precedió a la erupción era "terrorífico como de muchos caudalosos ríos".
Las comunidades cafetaleras quedaron sepultadas bajo las cenizas y la arena, causando una enorme pérdida en la producción de café y dejando a muchas personas sin hogar, debido a esto, la tragedia del terremoto de 1902 y la erupción del volcán Santa María siguen siendo recordadas como dos de los desastres naturales más catastróficos en la historia de Guatemala.