En los últimos seis meses, la situación en el Servicio Médico Forense de Tapachula, específicamente en el ejido Álvaro Obregón, ha alcanzado cifras alarmantes con al menos 42 personas que permanecen sin identificación.
Según informes extraoficiales, el personal de servicios periciales ha llevado a cabo el levantamiento de los cuerpos de estas personas, cuyos familiares aún no han logrado identificar. Dentro de este recuento, se destaca que 10 de los cuerpos pertenecen a individuos que han sido desmembrados y encontrados a lo largo del río Suchiate.
Paralelamente, otras 10 personas perdieron la vida debido a atropellos en diferentes municipios de la región fronteriza del Soconusco. Además, 12 cadáveres fueron abandonados en hospitales después de ser atropellados o debido a situaciones de abandono social, indicando que se enfermaron, fueron trasladados al hospital y fallecieron sin tener familiares cercanos.
El resto de las personas fallecidas están vinculadas al consumo de bebidas embriagantes, y su trágico desenlace ocurrió en la vía pública. La Fiscalía de Distrito Fronterizo Costa está llevando a cabo los trámites para que, antes de que termine el año, estos cuerpos que llevan aproximadamente seis meses en el servicio médico forense sean trasladados a una fosa común.
En la actualidad, los cuerpos en el frigorífico del SEMEFO están siendo sometidos a análisis y resguardados con la denominada "cápsula del tiempo" por la Fiscalía de Distrito. Esta iniciativa tiene como objetivo facilitar la futura identificación de los cuerpos, en caso de que sus familiares los busquen.
Es importante destacar que los 42 casos de cuerpos no identificados en el SEMEFO están siendo investigados por la fiscalía bajo el delito de homicidio calificado. Algunos casos también involucran abandono social, mientras que otros están vinculados a fallecimientos por adicción a las bebidas embriagantes en las calles de los municipios comprendidos en la jurisdicción de la Fiscalía Regional Costa Fronteriza.