Hasta el momento, de manera misteriosa, ha fallecido en el interior del Centro de Reinserción Social para Sentenciados (CERSS) 07, ubicado en Huixtla, un campesino originario de Motozintla. Ante este trágico suceso, sus familiares demandan que se haga justicia.
Abigail Morales, de 37 años, fue detenido el pasado 6 de diciembre por policías rurales del ejido Tarral, presumiblemente por disturbios en la vía pública. Pasó 48 horas en dicha cárcel y luego fue trasladado por personal del Ejército Mexicano para ser puesto a disposición del Ministerio Público. Posteriormente, fue acusado del delito de violación en grado de tentativa y recluido de inmediato en el Centro de Reinserción Social para Sentenciados (CERSS) 07 en Huixtla. Después de varios días, los familiares fueron informados de que Abigail había sido encontrado sin vida dentro de un tambo. Su cuerpo fue entregado para ser velado en la comunidad de Lubeka, en la zona alta de Tuzantán, en los límites de Motozintla.
La madre del fallecido, Felicita Morales Pérez, insta al gobernador del estado de Chiapas, Rutilio Escandón Cadenas, a llevar a cabo las investigaciones correspondientes y a castigar al director del Centro de Reinserción Social para Sentenciados (CERSS) 07 de Huixtla. Se destaca la falta de entrega de los resultados de la autopsia, además de la presunción de que la acusación por el delito de violación en grado de tentativa fue fabricada. Se menciona que la persona que realizó la acusación es un teniente del ejército mexicano, sin contar con las pruebas necesarias. Además, los familiares del fallecido señalan que son de escasos recursos y solicitan que el caso no quede impune.