Tapachula.- Un joven de 18 años, con lesiones en el brazo y con cicatrices de quemadura en todo de cuerpo, deambula por las calles de Tapachula, los errores cometidos en su juventud no le han perdonado, aquel 16 de octubre que fue acusado de haber robado una motocicleta en el camino a Leoncillo, donde les prendieron fuego junto a dos personas.
Aquel lunes 16 de octubre del 2018, alrededor de los 20;00 horas, unos campesinos les tendieron una trampa a los supuestos delincuentes, quienes habían robado más de 10 motocicletas con lujo de violencia y estaban cansados de los atracos que sufrían.
Los tres jovencitos entre ellos dos menores de edad, fueron rodeados por los campesinos, cuando con lujo de violencia se robaban una motocicleta, sin mediar palabras les prendieron fuego, pero aún seguían con vida.
En el lugar de los hechos sobre la carretera Tapachula - Puerto Madero, a un costado de la planta Moscamed sobre el callejón del cantón Leoncillos, la policía encontró a tres personas con quemaduras de tercer grado.
Miguel Ángel de 16 años, con domicilio en Puerto Madero, César “N” de 18 años, con domicilio en Buenavista y Adrián Yovanny “N” de 16 años de edad, con domicilio en Puerto Madero, quienes de acuerdo a los campesinos se dedicaban a robar motocicletas con lujo de violencia, sin embargo, les prendieron fuego.
Personal de Protección Civil y de la Cruz Roja Mexicana, les brindaron los primeros auxilios, los trasladaron al Hospital Manuel Velasco Suárez, sitio en el que los galenos reportaron el estado de los quemados como de gravedad, pero sobrevivieron a los embates de la quemadura.
Pese a que vecinos aseguraron, golpearon y quemaron a las dos personas, lograron salir con vida de la furia de la turba harta de los robos con violencia.
Miguel Ángel hoy tiene 19 años de edad, quien presenta lesiones en diferentes partes del cuerpo, el pasado domingo fue atendido por paramédicos de Servicios Auxiliares de Emergencia, pero fue dejado en el lugar.
Este lunes se encontraba en la central norte y 1ª calle poniente, quien se quejaba de dolor, fue atendido por los paramédicos de la Cruz Roja, e informaron que la herida del brazo estaba infectada y era posible que le cayera gangrena.
Los paramédicos decidieron trasladarlo al hospital, donde esperan que sea recibido, caso contrario morirá solo y abandonado en la vía pública.