Una alarma se generó la mañana de este viernes en una de las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) localizada en la colonia Laureles ya que los empleados habían manifestado que dos migrantes se habían desmayado y que se requería de apoyo médico.
La petición de ayuda se realizó alrededor de las 10:00 de la mañana, cuando efectivos de la policía estatal preventiva lograron llegar a las afueras de las instalaciones de dicho recinto, en donde tuvieron a la vista a dos muchachos que vestían playeras de color azul y rosa de complexión delgada, dijeron llamarse Nabeell N de 35 años junto con Obrar N de 36 años ambos de nacionalidad pakistaní los cuales estaba tratando de iniciar sus trámites para poder tener su estancia legal en México pero debido a que no habían probado alimentos y agua en varios días la espera y el calor de la zona se sumó a su debilidad provocándoles el desmayo.
Al atenderlos Paramédicos de la Secretaría de Salud, revisaron sus signos vitales los cuales se encontraban dentro de lo normal, así que con suero, los estabilizaron por la deshidratación que habían padecido y determinaron que no requerían ser trasladados a un hospital.
Luego de estos hechos, los uniformados procedieron a retirarse al ver que no era de una mayor magnitud el requerimiento de auxilio y decidieron implementar un operativo en esa zona en búsqueda de delincuentes o de Marco distribuidores que operan en ese lugar, además de que vecinos han señalado que también existe una banda que cristalean los carros en horas de la madrugada.