Cintalapa de Figueroa, Chiapas. El pasado 19 de septiembre, el lugarteniente del cártel Jalisco Marco Aurelio, alias "El Peligro", fue vinculado a proceso tras su detención en un operativo coordinado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), en el que también participaron diversas autoridades federales y estatales. Este operativo, realizado el pasado 11 de septiembre, fue resultado de una investigación que se derivó de múltiples denuncias por robo de vehículos en la comunidad de Malpaso, lo que llevó a las fuerzas de seguridad a la zona frailesca, donde se detectó la presencia de los vehículos robados.
Durante el intento de recuperación de las unidades, se desató un enfrentamiento armado en el que Marco Aurelio y su presunto grupo delictivo abrieron fuego contra las autoridades.
Este tiroteo, ocurrido en Villaflores, cobró la vida de un elemento de la Guardia Nacional, lo que aumentó la tensión en la región y culminó con la captura de los responsables.
En la audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal Federal en Cintalapa, el Juez de Control dictó auto de vinculación a proceso contra Marco Aurelio N, alias "El Peligro", Víctor Joaquín N, Francisco N, Iván Eduardo N, Selvin N, Nery Humberto N, y Maynom N. A todos se les imputa la posesión de armas de fuego, cartuchos y cargadores de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.
Asimismo, otro implicado, identificado como Abimelex N, fue vinculado a proceso por los mismos delitos, incluyendo la portación de armas de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
El juez determinó mantener la medida cautelar de prisión preventiva justificada para todos los detenidos y estableció un plazo de tres meses para la investigación complementaria, tiempo durante el cual se espera esclarecer más detalles sobre las actividades ilícitas de este grupo delictivo en la región.
La situación de violencia en la región frailesca ha generado preocupación en las autoridades y la población local. El conflicto entre cárteles ha llevado a una ola de inseguridad, con múltiples enfrentamientos armados, robos y secuestros.
Las autoridades han intensificado las operaciones de seguridad en coordinación con el Ejército y el Centro Nacional de Inteligencia para desmantelar a las células criminales que operan en la región.
Sin embargo, el panorama sigue siendo incierto, ya que los cárteles continúan disputando el control territorial.
