Tras descartar que la administración estatal este sometida ante grupos de la delincuencia organizada, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, afirmó que la masacre registrada en Zinapécuaro es resultado de la ruptura de pactos entre autoridades gubernamentales y organizaciones criminales
Durante la rueda de prensa que encabezó esta mañana en Zamora, Ramírez Bedolla dejó en claro que su administración ha cortado de tajo con pactos delincuenciales, hecho que genera reacciones violentas, como la registrada en el palenque clandestino.
“(El ataque armado) tiene que ver que estamos rompiendo con inercias del pasado y estamos viendo reacciones violentas por grupos de la delincuencia organizada”, afirmó.
Dijo que en su administración “no hay ningún acuerdo oscuro ni debajo de la mesa con ninguna asociación delictuosa” y dijo que por el contrario están enfrentando a todos los grupos criminales que tienen presencia en Michoacán.
“Hay operativos diarios, toda una estrategia echada a andar, cuesta trabajo, tiempo para que comience a dar algunos resultados, estoy seguro que vamos en ruta correcta”, dijo.
La noche del domingo se registró una agresión armada en un palenque clandestino, donde varios sujetos detonaron armas de fuego contra las personas que se encontraban en el lugar. Derivado de estos hechos 20 personas perdieron la vida y hasta el momento no ha sido detenida ninguna persona.
Durante su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció la masacre registrada en Michoacán y apuntó que habría sido consecuencia de un enfrentamiento entre grupos del crimen organizado.
Publicado originalmente en El Sol de Morelia